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De acuerdo con algunas publicaciones académicas y nuestro extendido trabajo en la medicina, sabemos que la mayoría de las personas que padecen enfermedades progresivas e incurables prefieren transcurrir sus últimos días en su hogar junto a su familia. Sin embargo, este deseo muchas veces no se puede cumplir por múltiples razones y se ven obligados a transitar el final de su vida en hospitales que no están preparados para atender el alivio del dolor físico y emocional que necesitan.

Es así que los hospices se instalan como un complemento del sistema de salud para abordar estas necesidades contemplando el aspecto profesional y espiritual, ayudando a sus huéspedes a vivir con dignidad hasta su partida.

Para conocer en profundidad el estado y desarrollo actual de los Cuidados Paliativos en nuestro país, los invitamos a leer el artículo «¿Dónde mueren las personas con enfermedades progresivas e incurables que se encuentran en la fase final de su vida? Experiencia en el Hospice Madre Teresa y en la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital Nacional Sommer», escrito por el Dr. Cristian Viaggio, Director Médico del Hospice Madre Teresa, en conjunto con la Dra. María de los Ángeles Minatel, Jefa de Área de la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital Baldomero Sommer; la Lic. Lorena Etcheverry, Psicóloga e integrante del grupo terapéutico del Hospice Madre Teresa; y la Dra. Valeria Tedeschi Médica de la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital Baldomero Sommer.

Resumen del artículo

La mayoría de las personas con enfermedades terminales transcurren sus últimos días en los hospitales con alto impacto de sufrimiento y con sus necesidades físicas, psicológicas, sociales y espirituales poco satisfechas.

La institucionalización y la medicalización excesiva en la fase final de la vida no logran aliviar el sufrimiento de los enfermos y la mayoría de las veces los priva de un cuidado humanístico adecuado. Los Hospices son un complemento en el sistema de salud que permiten abordar de forma profesional y solidaria esta problemática ayudando a los enfermos en situación de final de vida a vivir dignamente hasta su fin natural.

Las Unidades de Cuidados Paliativos en los hospitales públicos han sido una iniciativa muy importante del sistema de salud. La mayoría de las personas con enfermedades terminales fallecen internados en los hospitales y una minoría en sus hogares sin un adecuado alivio del sufrimiento. El sufrimiento debe ser aliviado –derecho al alivio del dolor– para que las personas enfermas al final de su vida puedan fallecer en plena dignidad.

Encontrá el artículo completo haciendo clic en este enlace.

Esta entrada tiene un comentario
  1. Una bella mirada hacia la dignidad del final de la vida. Trabajar para aliviar el sufrimiento y acompañar con amor y respeto al sufriendo y su familia

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