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El pasado sábado 28 de noviembre, celebramos un enriquecedor encuentro de voluntarios en la Casa de la Divina Misericordia. Fue una jornada llena de aprendizajes y emociones, que incluyó actividades y un rico almuerzo.

La reunión comenzó en el SUM de la Casa, donde todos los voluntarios, incluyendo quienes son nuevos, trabajan en diferentes turnos o participan de manera externa, tuvieron la oportunidad de presentarse.

Cada participante compartió quién era, qué hacía y respondió una pregunta seleccionada al azar sobre el Hospice Madre Teresa mediante una ruleta digital. Las preguntas abordaron temas profundos como: ¿Qué es lo que más disfrutan del voluntariado? ¿Qué les preocupa o estresa del Hospice?, ¿Cómo afrontan la muerte en este contexto?, ¿Cómo se ven dentro de su papel en el Hospice? o incluso ¿Quién elegirían ser si pudieran ponerse en el lugar de otra persona del equipo y por qué?. Estas reflexiones permitieron un intercambio valioso y fortalecieron el sentido de comunidad entre los voluntarios y voluntarias.

A continuación, Lorena Etcheverry, nuestra Co-Fundadora y actual Presidenta de la Comisión Directiva, brindó una presentación para repasar la esencia del cuidado Hospice: sus orígenes, los tres pilares fundamentales: competencia, cuidado integral, compasión y la importancia de los valores compartidos en el voluntariado.

Un momento destacado fue la proyección de un fragmento de la película El Circo de la Mariposa (2009). Las voluntarias, divididas en grupos, debatieron sobre las similitudes entre los valores de la película y los del Hospice, como la compasión y la empatía. Luego, compartieron sus conclusiones.

El Padre Juampi Contepomi también estuvo presente, brindando palabras de reflexión sobre el acompañamiento, la escucha y la contención en el cuidado hospice. Además, entregó postales como regalo para los asistentes, dejando un mensaje de gratitud y esperanza.

El almuerzo fue un momento agradable en el jardín de la Casa, con choripanes y hamburguesas preparados con esmero por voluntarios como Gustavo, Roberto y Juan. Fue una instancia para compartir, relajarse y fortalecer lazos de amistad y compañerismo.

Por la tarde, las actividades continuaron en el SUM. Lorena hizo un repaso de los valores más importantes del Hospice y, luego, se dividieron nuevamente en grupos para seleccionar los que consideraban más relevantes.

Cada grupo conversó sobre sus elecciones y las razones detrás de ellas, para finalmente transformar esas ideas en frases que resumieran lo que significa «Ser Hospice«. Las frases surgidas fueron:

“Ser Hospice es ser familia desde la diversidad, aprendiendo a reconocer y desarrollar lo mejor de cada uno al servicio del prójimo”; “Ser Hospice es brindar un cuidado amoroso y compasivo, respetando las individualidades y capacidades de cada persona”; y “Ser Hospice es una entrega de amor hacia el prójimo, con respeto, compromiso, paciencia y alegría”.

También realizaron un afiche para dejar plasmado el compromiso que toman pensando el 2025 que se avecina. Algunas de las palabras como servicio, amor, constancia, compromiso, fortaleza, unión y escucha, fueron colocadas en el afiche comunitario, reflejando el sentir colectivo del encuentro.

La jornada concluyó con la firma del compromiso anual de voluntariado y palabras de agradecimiento por parte de Lorena. El cierre estuvo acompañado de té y una deliciosa pastafrola casera preparada por Caro, una de las voluntarias.

Esta jornada permitió reconectar con la esencia del Hospice Madre Teresa y brindar un espacio para compartir relatos de otros voluntarios y voluntarias. Resultó profundamente emotivo comprender sus motivaciones para unirse al Hospice y conocer cómo llevan adelante sus tareas cotidianas.

Escuchar la alegría con la que entregan su tiempo y esfuerzo, y el amor que transmiten en cada acto de servicio, nos recuerda que la misión del Hospice va más allá de los cuidados paliativos, es una labor con un propósito trascendental que transforma tanto a quienes la reciben como a quienes la brindan.

Fue una experiencia movilizadora que reafirmó el valor de esta gran familia y el propósito compartido de brindar cuidado y acompañamiento al prójimo desde el corazón.

¡Que el 2025 nos encuentre nuevamente unidos y felices por lo que hacemos juntos!

Encuentro de voluntarios: una jornada para conectar con la causa

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