Por unos cuidados más justos contra el cáncer

Como cada 4 de febrero desde el Hospice Madre Teresa, damos visibilidad al Día Mundial contra el Cáncer y nos unimos a la campaña “Por unos cuidados más justos” para difundir y dar a conocer la enfermedad. El objetivo es disminuir la brecha de equidad en el acceso a información, prevención y tratamientos contra el cáncer.

Alrededor del 50% de la población mundial no tiene acceso a los servicios sanitarios esenciales. A pesar de los progresos significativos en la prevención, detección y tratamiento del cáncer, muchas personas siguen sin recibir atención médica básica.

Por una igualdad sanitaria

Sucede que quienes buscan tratamiento contra el cáncer encuentran barreras en la asistencia. Los ingresos, la educación, la localización geográfica y la discriminación basada en la etnia, raza, género, orientación sexual, edad, discapacidad y estilo de vida, son algunos de los obstáculos. Los grupos más desfavorecidos son también aquellos con más probabilidad de tener mayor exposición a factores de riesgo como el tabaco, una dieta poco saludable o peligros medioambientales.

Se alcanzará la equidad en la atención sanitaria cuando todos tengan la posibilidad de alcanzar su máximo potencial de salud sin barreras o limitaciones impuestos por las condiciones sociales o por otras circunstancias determinadas por la sociedad.

Podemos hacerlo juntos

El lema “Por unos cuidados más justos” para los años 2022-2024 busca revertir el sistema, mejorar la situación de una persona, aumentar el conocimiento sobre el cáncer y hacer que el acceso a los servicios sea más fácil.

Acciones concretas para disminuir la desigualdad:

• • Educar a la población sobre la prevención del cáncer;
  • Dotar a los profesionales sanitarios de habilidades y conocimientos que incluyan la influencia de las desigualdades en el tratamiento del cáncer;
  • Reforzar la atención primaria de salud que se proporciona en las comunidades;
  • Abordar mediante políticas y programas algunos factores económicos y sociales que pueden afectar negativamente a la salud de las personas;
  • Aumentar los recursos, tanto económicos como de personal, dedicados a la investigación del cáncer, y hacer un seguimiento de la carga económica del cáncer a nivel nacional para realizar inversiones más efectivas;
  • Aplicar planes de prevención y control del cáncer específicos a nivel nacional que aborden las necesidades y los recursos particulares de cada país.