Saltear al contenido principal

Conocí el Hospice cuando mi papá enfermó de cáncer. Con mi esposo y mi familia comenzamos a indagar de qué se trataban los cuidados paliativos para los enfermos y así encontramos el Hospice Madre Teresa. Nos desbordaba la angustia y teníamos muchos interrogantes. Buscábamos desesperadamente poder aliviar las secuelas de su enfermedad y encontrar alternativas para cuidarlo lo mejor posible hasta su último día de vida.

Llamé al teléfono de contacto y me atendió Paulita, me transmitió la confianza de que había muchas cosas que podíamos hacer por él y que desde el Hospice nos acompañarían en forma voluntaria para lograrlo. Familiarizados a las respuestas de la Obra Social de mi papá, esta devolución era increíble para nosotros.

Así fue como conocimos gente maravillosa con un gran corazón: Gastón, el Dr. Cristian, el Padre Luis, Teresita. Ellos nos orientaron profesionalmente, atendieron a las necesidades de mi papá y nos acompañaron como parte de nuestra familia en todo momento. Quedamos tranquilos de que pudimos hacer mucho por el bienestar de papá y que finalmente falleció en paz.

Vivenciamos con mi familia la obra maravillosa de Dios en ellos, que aún sin conocernos, nos ayudaron en ese momento de dolor.

Por eso, agradecida de todo lo que el Hospice hizo por nuestra familia, me ofrecí a colaborar como voluntaria. Comencé en el año 2008 haciendo el curso para voluntarios. Desde entonces soy parte de un grupo de personas, que me han permitido crecer, capacitarme y fortalecer mi fe. En estos cuatro años, he tenido la gracia de acompañar algunos pacientes en su final de vida y valoro cada momento que compartí con ellos y sus familias. Me han enseñado mucho y les estoy agradecida.

Doy gracias a Dios por ser parte del Hospice Madre Teresa.

Atte. Sandra Pérez
Voluntaria

Esta entrada tiene 7 comentarios
  1. Gracias Sandra por compartir nuestra tarea, tu dulzura es un regalo para nosotros y para los pacientes que acompañás.-

  2. Gracias Sandra ! por tu testimonio y por tu aporte constante a la tarea del Hospice. Tu sonrisa y sencillez siempre están presentes. Gracias nuevamente !

  3. Muy querida Sandra, gracias por tu testimonio, por tu fe, por tu dedicación en el Hospice y por seguir acompañando a los que más sufren.
    Dios te bendiga a vos y toda tu hermosa familia.
    cristian

  4. Muy querida Sandra, gracias por tu testimonio, por tu fe, por tu dedicación en el Hospice y por seguir acompañando a los que más sufren.
    Dios te bendiga a vos y toda tu hermosa familia.
    acristian

  5. Sandra, muchas gracias por el bello testimonio y la reflexión que va acompañando la narración. Me hace bien leer estas cosas. De verdad muy hermoso, Dios te bendiga y también a todo el Hospice. Muy hermoso.

Responder a julio c. barboza p. Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *